martes, 17 de noviembre de 2015

Era un domingo soleado

Era un domingo soleado, un domingo más, pero no para ti. Tú tenías partido como casi  todos los domingos pero el de ese día no era un partido normal para ti, tú jugabas contra un buen amigo tuyo que jugaba en el Griñón y además eran los primeros con poca diferencia sobre vosotros. Antes de que empezara el partido saludaste a tu amigo y le deseaste suerte. Había mucha expectación pero no te intimidaste ni te pusiste nervioso. El partido estuvo nivelado con poca diferencia de puntos .En los últimos instantes te hicieron una falta al arroyarte ,lo cual supuso dos tiros libres. Ibais perdiendo de uno, lo que significaba que si encestabas los dos tiros saldríais victoriosos y campeones del campeonato. En ese momento estabas muy nervioso debido a la presión, pero confiaste en ti y el primero entro, en el segundo estabas más nervioso aun pero cerraste los ojos y tiraste con la suerte de que entro, el “estadio” se vino arriba y os llevasteis el campeonato.

No hay comentarios:

Publicar un comentario